Es una sorpresa conocer que la Piedra Luna es una gama increíble de color aunque la que más conozcamos directamente sea la blanca nacarada. Pues sí, la Adularia es tan bella y con tantas tonalidades como la propia Luna. A veces a mi interior siendo amante de la Luna como lo soy le cuesta creer que su brillo sea un reflejo del Sol... de alguna manera a mí en lo menos racional me gusta sentirla como con una luz tan especial y de tantas gamas que sólo ella nos puede ofrecer. Es capaz de dibujar una de las imágenes que más aman ver mis ojos y es el camino de plata que su reflejo hace en el mar...
La Luna y las aguas, las aguas del planeta, las aguas de nuestro cuerpo, las aguas como elemento. La Luna está directamente conectada con ellas influenciándolas plenamente, ya sea en las mareas como en nuestras mareas emocionales internas (el agua es el elemento que reina nuestro cuerpo emocional).
 
Adularia (piedra de Luna): 
Es la auténtica piedra de Luna. Representa el equilibrio emocional, ayuda a calmar y equilibrar las emociones y fomenta un estado de paz y tranquilidad.
También representa la naturaleza cíclica de la vida y del ser humano.
Potencia el principio femenino en las personas: intuición, receptividad y creatividad. Apoya la integración del equilibrio entre las energías femeninas y masculinas.
Puede ser de gran ayuda para armonizar los desequilibrios hormonales femeninos.